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Otros gastos de operación es un concepto contable. Puede definirse como todos aquellos pagos que realiza la empresa para obtener los ingresos del ejercicio, con la condición de que provengan de la realización de la actividad principal de la empresa para la que fue constituida.
Se puede decir que son los gastos ordinarios, normales o habituales, esto es, conceptos recurrentes. Ejemplos de otros gastos de operación en lo que incurre una empresa en el desarrollo normal de su actividad son entre ellos:
- Gastos de investigación y desarrollo (por servicios encargados a otras empresas)
- Reparaciones y conservación
- Primas de seguros
- Suministros
- Arrendamientos (gastos de alquiler)
- Servicios de profesionales independientes (pagos a notarios, abogados, asesores fiscales, etc.)
- Transportes (realizados por otras empresas)
- Publicidad y propaganda
¿Qué son los gastos de operación?
Los gastos de operación, gastos de funcionamiento o «opex», se refieren a los gastos incurridos en relación con las actividades operacionales de una empresa.
En otras palabras, los gastos de operación son los gastos que una empresa debe realizar para llevar a cabo su actividad operativa.
Los gastos operativos son esenciales para analizar el rendimiento operativo de una empresa. Por lo tanto, es importante que tanto los analistas internos como los externos identifiquen el opex de una empresa.
Principalmente, pueden construir una comprensión de la eficiencia de la gestión de costes y ventas de la empresa.
¿Qué son las actividades operacionales?
Antes de calcular los gastos operacionales de una empresa, es esencial identificar las actividades operacionales o las actividades primarias de generación de ingresos de la empresa y otras actividades que no sean actividades de financiación o inversión.
Las actividades operacionales abarcan principalmente las actividades comerciales de la empresa.
Por ejemplo, la principal actividad operativa de una empresa manufacturera es producir el producto a partir de materias primas, mientras que para una empresa comercial es comprar productos del proveedor y venderlos a los usuarios finales.
Es fundamental señalar que las actividades operacionales difieren enormemente entre las distintas industrias. Una actividad comercial puede clasificarse como operacional en una industria, pero financiando o invirtiendo en otra.
Por ejemplo, la compra de un edificio suele ser una actividad de inversión en la mayoría de las industrias. Sin embargo, es una actividad operacional para las empresas inmobiliarias, dado que el edificio comprado está destinado a la reventa.
Gastos de funcionamiento y de capital
En el caso de las empresas, los gastos de explotación suelen incluir suministros, gastos de publicidad, gastos de administración, salarios, alquiler y gastos de servicios públicos. Sin embargo, cuando se trata de gastos de capital o relacionados con activos físicos, es importante marcar la diferencia entre los gastos de operación y los gastos de capital.
La contrapartida de los gastos de explotación son los gastos de capital, que son el costo de desarrollar o mejorar el sistema en el que una empresa realiza sus actividades operacionales. La compra de maquinaria, por ejemplo, se considera un gasto de capital. Por el contrario, la reparación y el mantenimiento de la maquinaria se considera un gasto de funcionamiento.
Importancia de los gastos de operación
Los gastos de operación son exclusivamente importantes porque ayudan a medir el costo de una empresa y la eficiencia de la gestión de las existencias.
Destaca el costo y las necesidades que una empresa necesita hacer para generar ingresos, que es el principal objetivo de una empresa.
Si una empresa incurre en un opex relativamente más alto en comparación con sus competidores, ello puede indicar que la empresa se enfrenta a una mala gestión de las existencias y puede experimentar un problema de exceso de existencias en un futuro próximo.
La desventaja de considerar el opex de una empresa es que se trata de un número absoluto, no de un ratio. Significa que los gastos no pueden reflejar el tamaño de una empresa, por lo que no es razonable utilizarlo como indicación entre empresas aunque pertenezcan al mismo sector.
Sin embargo, pueden ser muy útiles en el análisis horizontal, ya que pueden reflejar el rendimiento actual de la empresa en el pasado.
Licenciado en Económicas en la Universidad de Castilla La Mancha, apasionado del Sistema Financiero y especializado en finanzas personales.
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